“CUIDADO CON LA MURMURACIÓN”
Números 21:4-6
Dr. Alfonso Calderón E., Pastor
INTRODUCCIÓN: El pueblo de Israel iba camino a la tierra prometida, a la tierra que fluía leche y miel, pero al rodear la tierra de Edom, el pueblo se desanimó y por el desánimo el pueblo se comenzó a quejar contra Dios y su voluntad y contra Moisés.
Muchas veces no nos damos cuenta que todo nos parece mal, que todo nos molesta, que a nada le encontramos satisfacción, y el problema no son las personas a nuestro alrededor, ni las condiciones que vivimos, sino el desánimo que ha entrado a nuestra vida.
Pero en esta noche vamos a estudiar una de las manifestaciones más comunes de un cristiano desanimado: La murmuración y nos daremos cuenta lo peligroso que es permitir la murmuración en nuestra boca cuando somos hijos de Dios.
¿Qué es la murmuración? hablar en voz baja o entre dientes, especialmente manifestando queja o disgusto por alguna cosa y hablar mal de una persona que no está presente.
Nosotros como cristianos debemos de evitar murmurar y vamos a ver en la palabra de Dios porque
I. NO DEBEMOS MURMURAR CONTRA DIOS (NÚMEROS 14:20-30)
A. ¡NO SE ATREVA A TANTO ES PELIGROSO!
1) El Señor permitió que fueran enviados 12 espías a reconocer la tierra,
a) y al volver se quejaron contra Dios,
b) murmuraron en contra del Señor
c) y menospreciaron la bendición que Él tenía para ellos.
2) Por causa de la murmuración de los 10 espías y del pueblo
a) el Señor no permitió que entraran a la tierra prometida
b) sino que los castigó dejándolos morir en el desierto caminando durante 40 años.
3) En esta noche cada uno de nosotros tiene que reflexionar en su corazón,
a) ¿por qué mi vida está en neutro?
b) ¿Por qué no alcanzo nada en la vida?
c) ¿Porque no salgo de mi desierto?
d) y reconozcamos si no será que en nuestra boca hemos permitido la murmuración contra nuestro Dios,
e) si hemos permitido las quejas en contra de Dios.
II. NO DEBEMOS MURMURAR CONTRA NUESTROS PASTORES Y LÍDERES (NÚMEROS 21:5)
A. LOS PASTORES SON SOLO INSTRUMENTOS DE DIOS:
1) Los pastores y líderes son simplemente siervos e instrumentos puestos por Dios para su servicio,
2) al murmurar contra las personas que Dios ha llamado y elegido, estamos murmurando directamente contra Dios.
3) En la palabra de Dios vemos claramente que al Señor no le agrada que murmuren contra sus siervos (Números 16:41-45; Números 17:1-5)
4) Las autoridades de la iglesia han sido establecidas por Dios y si murmuramos contra lo que Dios ha establecido estamos rebelándonos contra el Señor (Romanos 13:1-2).
5) Si antes formabas parte de otra iglesia y ahora te congregas en esta iglesia
a) no murmures de tu pastor anterior,
b) si te congregas en esta iglesia no murmures de tus pastores y líderes,
c) ora por ellos,
d) comprende que Dios no te puede bendecir si te rebelas contra su voluntad.
III. NO DEBEMOS MURMURAR CONTRA LA VOLUNTAD DE NUESTRO DIOS (NÚMEROS 21:5)
A. NO TE QUEJES, SE AGRADECIDO:
1) El pueblo se quejó porque los había sacado de Egipto y los había llevado al desierto,
a) no estaban agradecidos por dejar de ser esclavos,
b) no estaban agradecidos por haber sido liberados por el poder del Señor.
2) No podemos murmurar contra el Señor
a) porque Él es soberano,
b) Él es el alfarero de nuestra vida,
c) nosotros somos barro,
d) y el barro no puede quejarse contra lo que el alfarero está haciendo con el (Romanos 9:20-21).
e) Reconozcamos ¿quiénes somos nosotros para altercar o pelear contra nuestro Dios?
CONCLUSIÓN: No murmuremos, no nos quejemos, que de nuestra boca fluyan alabanza de labios agradecidos con nuestro Dios, si hay situaciones en nuestra vida que no nos agradan, en lugar de quejarnos o murmurar, alabemos, sacrifiquemos alabanza a nuestro Dios (Hebreos 13:15)